La turbina odontológica es un instrumento imprescindible en muchas intervenciones clínicas. Existe un amplio surtido de modelos y sus prestaciones a veces son similares, por lo que intentaremos aclarar cuáles son las características más importantes que pueden resultar útiles al elegir este dispositivo.
La turbina es un instrumento giratorio impulsado por aire comprimido que puede girar a altísimas velocidades, de unas 400 000 rpm. Esto hace que la turbina resulte ideal para raspar y cortar el esmalte y los materiales utilizados en las prótesis fijas.
Su alta velocidad produce un aumento de la temperatura, por lo que es necesario encontrar una forma de enfriar el área de intervención. La irrigación con aire y agua es fundamental para no dañar la pulpa del diente manteniendo lo más baja posible la temperatura generada por el roce.
Por lo general es preferible disponer de tres o cuatro puntos de irrigación. Estos permiten obtener:
Además, el spray libera el campo de trabajo de los residuos producidos durante el uso de la turbina.
La turbina aloja un rotor con álabes, que giran impulsados por el aire comprimido.
Mientras usa la turbina, el odontólogo utiliza el mando de pie para regular la presión de servicio de manera gradual y progresiva. Esta regulación permite determinar la velocidad hasta el valor máximo previsto.
Junto al rotor, los componentes más importantes de la turbina odontológica son los cojinetes, que deben resistir al roce durante toda la vida del instrumento. La calidad de los cojinetes, unida a una correcta lubrificación de la pieza de mano, contribuye a su longevidad y garantiza las máximas prestaciones.
La lubrificación periódica y un mantenimiento regular garantizan una mayor duración y prestaciones constantes. Para los instrumentos dinámicos se aconseja seguir las indicaciones de la empresa fabricante.
Hoy en día el mercado ofrece aparatos que efectúan ciclos automáticos de lubricación y purga de la turbina y de los otros instrumentos giratorios. Algunos dispositivos, como Thalya, gestionan de forma simple el procedimiento. Con Thalya Plus también están disponibles las fases de lavado, desinfección y secado. Siguiendo las recomendaciones de la empresa fabricante, la turbina es esterilizada en autoclave para completar el reacondicionamiento del instrumento.
Son varios los aspectos que pueden guiarnos a la hora de elegir la turbina. Tenemos que considerar el precio, pero también necesitamos definir atentamente los requisitos mínimos que debe cumplir en lo que respecta a la calidad.
¿Cuáles son las cualidades clave que deben interesarnos? Todo lo que influye en la eficacia y en la durabilidad de la pieza de mano.